Algunos precedentes albertinos del tomismo

Los santos y los pensadores aparecen en el curso de la Historia en constelaciones, como las estrellas en el firmamento. En el siglo XIII, después de santo Domingo de Guzmán, la orden dominicana floreció en santidad y ciencia. Entre otros, san Alberto Magno y santo Tomás de Aquino, Maestro y Discípulo respectivamente, unidos en el ideal dominicano de la difusión de la verdad, fueron adalides de profundidad filosófica y teológica.

Razón humana y conocimiento de Dios, en San Alberto Magno

El tema del conocimiento racional de Dios es de perenne actualidad. La falta de confianza en la razón humana conduce al fideísmo; el optimismo excesivo sobre su capacidad lleva al ontologismo intuicionista; la limitación de sus posibilidades a lo empírico la sumerge en el angustiante agnosticismo, que privado de sentido metafísico desemboca en el ateísmo. Sin un sano equilibrio acerca del valor y del poder de la razón humana, no es posible alcanzar un conocimiento racional de Dios.