Causas y efectos de la desesperación teológica en Tomás de Aquino y la encíclica Spe Salvi

Benedicto XVI enseña que la actual crisis de fe se originaría a partir del reemplazo de la esperanza cristiana en el reino de Dios por la esperanza mundana en el reino del hombre. En lenguaje de Tomás de Aquino, este proceso de desesperación implica la aversión (aversio) del objeto formal de la esperanza cristiana y la conversión (conversio) hacia los bienes creados. Esta conversión –que busca el restablecimiento del paraíso terrenal– es originada eventualmente por la pérdida de la fe, pero es causada inmediatamente por el vicio de acedia. A esta conexión elaborada por santo Tomás, debemos agregar el papel que el Pontífice germano atribuye al sufrimiento en el origen de la desesperación teológica.

La razón formal de Deidad según Réginald Garrigou-Lagrange O.P.

La razón formal de deidad atravesó la vida y obra de R. Garrigou-Lagrange y de cuya contemplación se irradiaron los aspectos filosóficos, teológicos y místicos de su pensamiento. Esta razón formal supone no sólo la multiplicidad de perfecciones absolutas encontradas en las creaturas y predicadas analógicamente a Dios, sino también, su esencia una y trina. Nuestro trabajo busca indagar en las raíces,el desarrollo y el aporte del pensamiento del P. Garrigou para la contemplación de la esencia divina de acuerdo al modo imperfecto del intelecto humano durante esta vida y la participación de la misma a través de la gracia santificante.

La naturaleza del hábito de intelecto supernaturalis. Su importancia según el pensamiento de Santiago Ramírez

A diferencia del orden natural, el hábito de los primeros principios sobrenaturales no es una especie átoma sino un género de hábitos intelectuales, en el que sobresale el don de intellectus. Para una adecuada comprensión del mismo, Santiago Ramírez rescata dos aspectos particulares del pensamiento de santo Tomás: uno filosófico, la distinción real que existe entre disposición y hábito en el predicamento qualitas; y otro teológico, la distinción real entre virtudes infusas y dones del Espíritu Santo.