Los Votos religiosos

El religioso promete a Dios los tres votos de castidad, pobreza y obediencia, aceptados por la Iglesia, con los cuales el cristiano se consagra a Dios y se le abre un camino expedito para el servicio eficaz de Dios y de la Iglesia, porque por ellos el religioso se entrega enteramente a Dios, para emplear toda su vida exclusivamente a su servicio. «Por los votos, dice el Concilio, o por otros sagrados vínculos análogos a ellos a su manera, se obliga el fiel cristiano a la práctica de los tres consejos evangélicos antes citados, entregándose totalmente al servicio de Dios sumamente amado, en una entrega que crea en él una especial relación con el servicio y la gloria de Dios».

Dimensión trascendente de la persona

Tal vez no haya, en la actualidad, un tema más debatido y en el que se haya gastado más tinta que el de la persona. La persona ocupa el centro de atención de la humanidad. De ahí que sea de sumo interés el saber de una manera descriptiva, al menos, qué es la persona para poder hablar de ella con la menor imprecisión ya desde el comienzo. La persona ha recibido diversas acepciones, a tenor de los distintos intereses que han convergido en ella. Su riqueza permite una visión plurifacética. Esta, sin embargo, no agota toda su hondura. Efectivamente, la persona no es catalogable en unos esquemas prefabricados, povque su característica más saliente de «vida» lo impide.

Número 69

Año 23 | 1974 Artículos Dimensión trascendente de la persona Salvador Vergés Los Votos religiosos Clemente Pujol La conversión de la materia a la forma. Notas de merafísica agustiniana Juan Pegueroles Notas y documentos ¿Hay contradicción formal en el método de Kant?...