Verdad e inteligibilidad. Los rasgos invariantes de la teoría platónica de las ideas

Pocas doctrinas filosóficas han ejercido un influjo tan duradero como la teoría platónica de las Ideas. Las opiniones sobre ella, referidas al modo adecuado de entender las Formas y a su sentido metafísico último, se han sucedido ininterrumpidamente desde que Platón la formulara en sus diálogos. Su discípulo más inmediato es el primero de una interminable serie de pensadores, que llega hasta nuestros días, empeñados en desentrañar la significación del complejo sistema platónico.

Verdad e inteligibilidad. Los rasgos invariantes de la doctrina platónica de las ideas

Hemos expuesto la teoría de las Ideas tal como aparece en el primer grupo de diálogos tempranos. Pasamos ahora a ocuparnos del segundo, con el propósito de seguir indagando la doctrina ideal platónica, prestando atención preferente a los progresos y avances de este segundo grupo de diálogos con respecto al anterior. Nos ocuparemos en esta ocasión del Crátilo, Menón y Banquete.

Tradición, Modernidad y Revolución

El destino de los filósofos y pensadores suele ser muy desigual. Mientras unos gozan de general reconocimiento y admiración duradera, otros brillan sólo fugazmente o permanecen olvidados durante siglos, sin que los investigadores o estudiosos dediquen sus energías a rescatarlos y a presentar sus doctrinas a los contemporáneos. En el dominio de la poesía existe un caso llamativo de abandono injustificado -el del gran lírico alemán Heinrich Reine-, cuya fama y renombre se extinguieron rápidamente tras su muerte, a pesar de que en vida del poeta sólo fueran superados por los de Goethe.